Costa Maya es una región de Quintana Roo muy cerca de Belice en la que se pueden encontrar playas de arena blanca y aguas turquesas, selvas abundantes y mucha naturaleza. Ahí está Mahahual, la playa más bonita de Costa Maya perfecta para conocer en tus próximas vacaciones. Este edén ubicado a la orilla del mar alberga un arrecife de coral considerado el segundo más grande del mundo.
Además está ubicado en una zona protegida en la que abundan especies marinas como delfines, tortugas, manatíes y otras especies. En tierra la biodiversidad es tan rica que resguarda jaguares, tucanes, monos araña, tigrillos y otros felinos, además de reptiles y aves. Por ello si buscas un paraíso para disfrutar algo más que arena, sol y mar, prepara las maletas y lánzate a Mahahual, seguro no querrás regresar.
Qué hacer en Mahahual
Mahahual es un pequeño puerto de pescadores que durante años permaneció oculto y lejos del bullicio del turismo masivo. Hoy todavía conserva su esencia de pueblo costero y ambiente bohemio perfecto para disfrutar largos días a la orilla del mar para pasear en bicicleta por la orilla de la playa para contemplar las aguas turquesa del mar Caribe. Mahahual también es un conocido puerto de cruceros a donde llegan viajeros de todo el mundo para nadar en estas aguas de oleaje suave.
Ahí también se puede hacer un tour de esnórquel hacia los arrecifes de coral para descubrir decenas de especies marinas que habitan ahí. Seguro veras tiburones gata, pulpos, pez aguja, tortugas, estrellas de mar, entre otras. Pero este lugar, conocida como la Reserva de la Biósfera del Banco Chinchorro también atrae a buzos de todo el mundo quienes se sumergen en estas aguas cálidas llenas de vida.
Por la tarde, después de explorar el arrecife es obligado pasear en bicicleta por toda la zona costera para admirar el atardecer. La mayoría de los hoteles y restaurantes que se ubican cerca de la playa te prestan o alquilan la bici a bajo costo. Detente a observar el cielo pintado de tonos rojizos y anaranjados enmarcados por pelícanos y garzas que caen en picada en el mar. Un paisaje memorable y digno de una fotografía.
No olvides entrar a los restaurantes que preparan platillos del mar con toques contemporáneos y con ingredientes locales en los que se mezclan diversos sabores y que son una caricia para el paladar. Para hospedarte la oferta es amplia y variada, desde hostales y hoteles boutique hasta hoteles de cinco estrellas. También hay cabañas rústicas o incluso puedes acampar en la playa para disfrutar una experiencia más natural.