Chignahuapan proviene del náhuatl y significa “sobre las nueve aguas” o “donde abunda el agua” y fue ocupado por pueblos totonacas durante la época prehispánica y a partir del siglo X, empezó a surgir una coexistencia con tribus nahuas, otomíes y tepehuas en toda esta región montañosa.
Se localiza a una altitud de 2,280 metros, posee un clima semifrío y temperatura media, por lo que se recomienda ir bien abrigado si viajas en invierno. Chignahuapan es un pueblo muy distintivo por la producción de loza de barro rojo, ollas, cazuelas y macetas, además de tejidos de lana, cobijas, capas y las tradicionales esferas navideñas.
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Este sitio es un pueblo muy cercano a la capital metropolitana, pues llegarás a su centro histórico en tan sólo dos horas con treinta minutos, en un viaje por carretera con tu automóvil particular, un lugar de fácil acceso para los capitalinos. A continuación te presentamos qué puedes hacer en Chignahuapan en tu próximo viaje.
1. Conocer el quiosco del pueblo
Se encuentra en la Plaza de Armas, en el centro histórico del pueblo, es un colorido ícono de Chignahuapan que fue levantado en 1871, hecho totalmente de madera en estilo mudéjar, del cual destaca una hermosa fuente que resguarda en su interior, un excelente punto de reunión para tomarte las mejores selfies en tu próximo paseo por este pintoresco lugar.
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2. Visitar el santuario a la virgen más grande del mundo
Para conocer este increíble santuario tienes que visitar la Basílica de la Inmaculada Concepción, que se encuentra a unos cuantos pasos de la Plaza de Armas de Chignahuapan, donde podrás contemplar esta escultura que mide 12 metros de altura, un monumento sorprendentes que encantará a los amantes del turismo religioso que celebra su fiesta patronal cada 8 de diciembre.
3. Admirar la fachada de la Parroquia de Santiago
Este recinto religioso fue construido por los franciscanos, un templo muy digno representante del barroco indígena. En la parte superior de esta construcción, se puede encontrar la imagen del santo montado a caballo y, en su torre lateral derecha, se ubica un elegante reloj de la fábrica Centenario de Zacatlán de las Manzanas.
4. Encuentra la estatua del comediante Capulina
La estatua del comediante se ubica en la Plaza de Armas, este monumento cosntruído en honor al comediante, que nació en Chignahuapan un día 6 de enero de 1926, con el nombre de Gaspar Henaine, reconocido alguna vez como el “rey del humorismo blanco” en nuestro país y que muchos recuerdan con un gran cariño por sus películas.
5. No te olvides de comprar esferas
Durante todo el año, pero especialmente entre los meses de octubre y diciembre, los artesanos de Chignahuapan producen cientos de esferas coloridas de varios tamaños, modelos y colores, el accesorio perfecto para adornar tu arbolito de Navidad, a precios muy económicos, las cuales puedes adquirir cualquier día del año en uno de tus paseos por este mágico lugar.
6. Explora sus cascadas cercanas
Si eres de los que prefieren pasar una buena tarde en medio de la naturaleza y los sitios más sorprendentes, no te puedes perder un viaje a las cascadas Salto de Quetzalapan, con una impresionante caída de agua de 200 metros, un espacio que se localiza a 9 kilómetros del centro del pueblo, donde también podrás aventarte en tirolesa, atravesar su puente colgante o hacer rappel.
7. Visitar su laguna
La laguna de Chignahuapan es un maravilloso cuerpo de agua que en los meses de noviembre, presenta su espectáculo tradicional de Día de Muertos el Festival de la luz y la vida. Se trata de un espacio excelente para hacer ejercicio, pasear en lancha o simplemente, disfrutar de un día de campo al sentarte frente a esta laguna, para contemplar el hermoso paisaje de este espejo acuático.