Oaxaca es uno de los estados mexicanos con una gran riqueza cultural, que se ve reflejada en sus festividades, tradiciones, costumbres, así como en su exquisita propuesta gastronómica, en la que destaca el Tejate, la bebida de los dioses que deberías probar durante tu viaje a la Guelaguetza. Así que si vienes a esta gran celebración oaxaqueña, no te pierdas la oportunidad de degustar uno de los tragos más populares de esta región y que su origen se remonta a la época prehispánica.
Tras dos años de ausencia por la pandemia de COVID-19, la Guelaguetza está de regreso, y con ello diversas actividades que buscan enaltecer a la cultura oaxaqueña a través de la presentación de diversos bailables, obras de teatro, exposiciones y degustación gastronómica, entre las que destacan esta bebida milenaria que era utilizada dentro de ritos ceremoniales, así como catalogada como una “bebida de los dioses”. Pero, ¿cuál es su origen? Aquí te lo contamos.
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Cuál es el origen del Tejate
De acuerdo con Larousse Cocina, el nombre de esta bebida oaxaqueña proviene del náhuatl textli, masa y atl, agua, que en español podría traducirse como “agua harinada”. Fue creada durante la época prehispánica en los Valles Centrales de Oaxaca. Y era uno de los tragos preferidos de los mixtecos y zapotecos que habitaban esta zona.
El Tejate tuvo un gran valor ceremonial porque únicamente se bebía durante la siembra o en la cosecha del maíz. Y sus ingredientes pueden variar dependiendo de la región donde se prepare. Actualmente, esta bebida es consumida para que sus habitantes y turistas disfruten de un buen trago que los refresque del calor. Así que no te pierdas la oportunidad de degustar esta bebida milenaria durante tu visita a la Guelaguetza.
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De qué está hecha la bebida de los dioses
Esta bebida consiste en un líquido espumoso que se elabora a base de maíz y cacao. Pero, como lo mencionamos anteriormente, sus ingredientes y elaboración dependerá mucho de la región donde se prepare. Existen datos en donde se asegura de que en la antigüedad se ponía a cocer el maíz en forma de nicuanextle o tlaciahual, luego se molía con el cacao, así como rositas de cacao y pataxte. Se sabe también que en la actualidad algunas recetas incluyen pixtle.
Una vez terminado este paso, la mezcla se vierte en una vasija de barro que es conocida como “apaste”. Luego la mezcla se disuelve en agua y se comienza a batirse con las manos hasta que se haga una espuma. Después se le agrega agua, que se deja caer a unos 20 centímetros de altura. Y en muchos de los casos puede contener azúcar. Una vez que esté lista, se servirá en jícaras de color rojo. Y podrás encontrarla en los mercados de Oaxaca.