Veracruz es uno de los estados mexicanos que destaca por sus increíbles paisajes naturales que te dejarán maravillado durante tu visita. Este destino mexicano también ha ganado reconocimiento mundial por sus tradiciones, costumbres, así como por sus asombrosas leyendas que han pasado de generación en generación. Uno de estos lugares que alberga una leyenda que han sido contadas por los ancestros de la huasteca veracruzana, sucede en el Río Tancochin, el místico lugar de la huasteca veracruzana donde aún habita ‘La Tepa’.
Este hermoso cuerpo de agua veracruzano abastece a miles de familias que se encuentran ubicadas en el municipio de Tancoco. De igual manera, el Río Tancochin cruza los municipios de Naranjos-Amatlán, Chinampa y termina en la laguna de Tamiahua, ubicación geografía en la que destaca una increíble postal natural, que alberga una mística leyenda que ha perdurado hasta nuestros días.
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Leyenda de La Tepa en el Río Tancochin de Veracruz
La leyenda que cuentan los antiguos habitantes de la huasteca veracruzana asegura que en el Río Tancochin, en punto de las 12:00 del día, aparece una misteriosa mujer de imponente belleza que es conocida como La Tepa. Quienes han sido testigo de su presencia afirman que se trata de una hermosa mujer de esbelta figura, con tez blanca que se asemeja al marfil, así como una enorme cabellera que se mueve al ritmo de sus caderas al caminar.
Según el relato, una de las señales para saber que "La Tepa" está por manifestarse, es que el viento comienza a hacerse más fuerte y en las orillas del río aparece esta mujer entonando melodías tristes en una lengua no conocida, mientras se baña desnuda. Quienes han sido testigos de su presencia quedan tan impresionados que no resisten la curiosidad y deciden acercarse. Pero vaya sorpresa que se llevan, por el hecho de que esta misteriosa mujer revela su verdadera apariencia que deja atónitos a quienes deciden verla de frente.
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La hermosa mujer de cantos melódicos deja a un lado su imponente belleza para convertirse en un ser terrorífico en donde su rostro comienza a tornarse de color amarillo y amoratado, además su boca se altera de una manera que denota terror o sufrimiento. Lo que más impresionan son sus ojos, ya que dejan a un lado esa calidez y dulzura para volverse aterradores y reflejan odio puro.
El hermoso cabello de "La Tepa" se torna como un estropajo de paja. Y en lo que respecta sus manos, las uñas comienzan a tornarse más largas y afiladas. Su transformación tiene un único propósito: quitarles la vida a las personas que se encontraban caminando en esta zona. Aunque también existen anécdotas en donde se asegura que hay caminantes que corren con suerte, donde su presencia solo les provoca fiebres y alucinaciones que pueden durar varios días.
A raíz de este peculiar suceso, los habitantes de este sitio se dieron a la tarea de encontrar una manera de “controlar” a "La Tepa", así como mantenerla lejos de sus cultivos, la cual se ha mantenido hasta nuestros días. La solución que encontraron fue poner una ofrenda que consta de siete cazuelas de barro con comida, así como siete tazas con café, agua y aguardiente. También optaron por ponerle dos copaleros en donde se quema incienso y como adornos decidieron poner a su alrededor figuras que son conocidas como teopaquetl para mantenerla alejada.