Bacalar es un paradisíaco Pueblo Mágico que se encuentra en el estado de Quintana Roo, muy cerca de Chetumal. En cuanto al origen de su nombre, este proviene del maya ‘Bakhalal’ que en español significa “cerca o rodeado de carrizos”. Y se caracteriza por poseer una hermosa laguna de profundidad poco profunda que permite a sus visitantes nadar placidamente, así como realizar diversas actividades acuáticas.
Además, una de las peculiaridades de esta magnífica laguna es que pueden apreciarse siete tonalidades de azul, motivo por el cual también se le conoce como “Laguna de los Siete Colores”. Sin embargo, en los últimos días se ha reportado que dichas tonalidades, que van desde los azules turquesas hasta los azules fuertes, han desaparecido como consecuencia de las fuertes lluvias que se han llevado a cabo en esta zona turística. Pero ¿qué es lo que ocurre?
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Durante esta temporada de tormentas y huracanes que se han presentado en el Caribe Mexicano, la laguna que se encuentra en Bacalar ha adquirido una tonalidad de color café y verde. Así lo reportó a EFE David Martínez, uno de los miembros de Guardianes de la Laguna, organización que se conformó durante la tormenta Cristobal que tocó tierras mexicanas en 2020 y tiene como principal propósito defender el medioambiente en Bacalar.
¿Por qué están desapareciendo los 7 colores de la laguna de Bacalar?
Durante la tormenta de Cristóbal que ocurrió en 2020, la laguna de los 7 colores de Bacalar quedó gravemente dañada y hasta la fecha no había podido recuperarse del todo. Y ante esta nueva temporada de precipitaciones climáticas en el Caribe Mexicano, este cuerpo de agua ha adquirido una tonalidad de color café que ha alcanzado la zona turística de esta zona.
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Tras la tormenta Cristóbal, el manglar que existía en este sitio y que fungía como barrera gran parte de su formación quedó destruida, por lo que el escurrimiento a la corriente de agua en este 2022, llegó a afectar a la laguna de Bacalar. Los residuos que han arribado a esta laguna, ya no solamente se trata de agua pluvial, sino también de tierra suelta que es resultado de la deforestación, así como basura, agroquímicos y otras sustancias. Esto de acuerdo con una declaración que Alfredo Yáñez, investigador del Colegio de la Frontera Sur (Ecosur), dijo a EFE.
De igual manera, Yáñez aseguró que los caracoles chivita y los microbialitos, organismos que habitan en la Laguna de Bacalar resulten gravemente afectados por el paso de estos desechos que ponen en riesgo la calidad del agua de este cuerpo de agua, así como de toda la flora y fauna que habita en esta zona.
Con información de EFE